Muddy Waters nació en 1915 bajo el nombre de McKinley Morganfield en el delta del Mississippi, al igual que muchos otros bluseros de su época. En 1940 se mudó a St. Luis en donde comenzó a realizar sus primeros conciertos con diversas bandas locales. Es en ese período en que la Librería del Congreso estadounidense realiza las primeras grabaciones de Waters, en un proceso que pretendía registrar a diversos compositores de blues.
En 1943 el guitarrista tomaría el paso más importante en su carrera… mudarse a Chicago. Con ello pudo acercarse a los circuitos del blues y especialmente entablar contacto con Leonard Chess, dueño del sello que lleva su apellido, el más importante en la promoción del blues estadounidense.
En 1946 comienza su relación con aquella casa discográfica, y en 1948 se registra su primer gran éxito: el single Rollin’ Stone. De ahí en adelante la carrera de Waters estaría marcada por el triunfo. En los sesenta su obra ya había cruzado el Atlántico para transformarse en la guía de cientos de bandas. Incluso figuras como Eric Clapton, The Rolling Stone, y más tarde Jimi Hendrix admitirían su devoción por el blusero.
Pero cansado de los requerimientos de su sello, Waters se mantuvo en un silencio creativo que duro hasta 1977 cuando regresa con su placa Hard Again.
Con este nuevo trabajo, el músico consiguió volver a su antiguo sonido, al que lo había hecho grande entre los grandes y que lo convertiría en el rey del Chicago Blues.
muddy waters and the rolling stone - mannish boy
En 1943 el guitarrista tomaría el paso más importante en su carrera… mudarse a Chicago. Con ello pudo acercarse a los circuitos del blues y especialmente entablar contacto con Leonard Chess, dueño del sello que lleva su apellido, el más importante en la promoción del blues estadounidense.
En 1946 comienza su relación con aquella casa discográfica, y en 1948 se registra su primer gran éxito: el single Rollin’ Stone. De ahí en adelante la carrera de Waters estaría marcada por el triunfo. En los sesenta su obra ya había cruzado el Atlántico para transformarse en la guía de cientos de bandas. Incluso figuras como Eric Clapton, The Rolling Stone, y más tarde Jimi Hendrix admitirían su devoción por el blusero.
Pero cansado de los requerimientos de su sello, Waters se mantuvo en un silencio creativo que duro hasta 1977 cuando regresa con su placa Hard Again.
Con este nuevo trabajo, el músico consiguió volver a su antiguo sonido, al que lo había hecho grande entre los grandes y que lo convertiría en el rey del Chicago Blues.
muddy waters and the rolling stone - mannish boy
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